El famoso tren de lujo europeo Expreso de Oriente, que inauguraba su servicio en 1883, cubría el trayecto desde Paris hasta Constantinopla, actual Estambul, cruzando los Alpes y atravesando las entonces lejanas y exóticas tierras de Hungría o Bulgaria.
El famoso tren de lujo europeo Expreso de Oriente, que inauguraba su servicio en 1883, cubría el trayecto desde Paris hasta Constantinopla, actual Estambul, cruzando los Alpes y atravesando las entonces lejanas y exóticas tierras de Hungría o Bulgaria. El viaje no era sencillo, ya que varios trasbordos eran necesarios hasta que se terminó la línea hasta la capital del imperio Otomano.
Chefs de renombre, los mejores productos gastronómicos y músicos a bordo amenizaban la travesía de los personajes de la alta esfera social del momento, lo cual le valió el nombre de Tren de los Reyes. Sus viajes inspiraron reconocidas novelas de diversos géneros.
El convoy estaba compuesto por dos coches cama de 20 cabinas con literas, las cuales durante el día se convertían en salones, y un coche restaurante que estaba situado entre el furgón del personal y el furgón de equipajes.
Las paredes de los coches eran de madera de teca, nogal y caoba. La tapicería estaba repujada en oro, las sábanas eran de seda; los sanitarios, de mármol; las copas, de cristal y la cubertería, de plata. Los coches tenían gruesas alfombras, estaban aislados y dotados de iluminación a gas, calefacción central y agua caliente.
El Orient Express en la actualidad
Al itinerario original, se sumaron otras vías y servicios, varias veces discontinuado, hasta su último viaje en 1977. Luego, la firma Venice Simplon-Orient-Express reflotó la empresa, ofreciendo un servicio turístico de lujo por las principales ciudades europeas como Venecia, Roma, Londres, París, Bucarest, Budapest, Viena, Praga y Estambul. Es un tren de época que cuenta con 17 vagones entre los cuales hay 11 coches-cama, construidos entre 1926 y 1931, que mantienen su elegancia y suntuosidad tanto en la ambientación como en el servicio de primer nivel.
Una vez al año Venice Simplon-Orient-Express repite el recorrido original desde Paris a Estambul en un viaje que dura 6 días y 5 noches.
Partiendo de París, la primera noche se duerme en la cabina del tren, disfrutando sin apuro los lujosos ambientes, exclusivos restaurantes, y el servicio de primer nivel a bordo, para llegar al día siguiente a Budapest, tras atravesar los típicos paisajes de la gran llanura húngara, campos de cereales, con algunas que otras casitas con tejados a dos o cuatro aguas. Un vez en Budapest los pasajeros se alojan en un lujoso Hotel y realizan una visita guiada por la ciudad.
Nuevamente en el tren, este sigue su recorrido llegando a la ciudad Rumana de Sinaia y haciendo una parada para visitar el Castillo de Peles, considerado uno de los más bonitos de Europa. Este lugar fue visitado por los pasajeros del viaje inaugural del Orient-Express en 1883, cuando lo acababan de construir.
Esa noche, los pasajeros se alojan en Bucarest para partir al día siguiente rumbo a Bulgaria, cruzando el Danubio, para llegar a Estambul tras otra noche a bordo del Orient Express.
En la actualidad pueden realizarse viajes de un día hasta una semana. El más popular es el que une Paris con Venecia en un viaje de 2 días con una noche a bordo, recorriendo magníficos paisajesmontañosos del centro de Europa, desde confortables vagones que superan las expectativas de los viajeros más exigentes. El servicio incluye un completo desayuno en la cabina, almuerzo merienda y cena en su Bar Car con música en vivo y 3 restaurantes temáticos: L’Oriental, Etoile du Nord y Côte d’Azur.
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