La zurda tandilense tuvo un feliz inicio de campeonato en Francia, venciendo en partido correspondiente a la primera ronda del 50K que se juega en Montpellier sobre canchas de polvo de ladrillo, a la checa Barbora Krejcikova, su compañera en la prueba del dobles y junto a quien se coronó en la especialidad, en el similar de Padova, el pasado fin de semana.
La zurda tandilense tuvo un feliz inicio de campeonato en Francia, venciendo en partido correspondiente a la primera ronda del 50K que se juega en Montpellier sobre canchas de polvo de ladrillo, a la checa Barbora Krejcikova, su compañera en la prueba del dobles y junto a quien se coronó en la especialidad, en el similar de Padova, el pasado fin de semana.
En la previa se observaba como un debut con ciertas dificultades para María Irigoyen (que sigue progresando en el ranking de la WTA y ya está situada en la 157º posición, aproximándose a su mejor registro histórico: 155º) considerando que Krejcikova figura 140º, sin embargo sorteó la exigencia e impuso autoridad para cerrar a su favor en sets corridos: 7/6 (3) y 6/3.
Campeona en Túnez la primera semana de mayo pasado, Irigoyen que permanece como la principal raqueta argentina en el escalafón internacional está ratificando que transita uno de los mejores momentos de su carrera, ilusionándose con mantener el nivel actual y continuar en evolución.
Tras el objetivo de dar otro paso en Montpellier, estará dirimiendo con la francesa Constance Sibille (310º e invitada por la organización) que dio la sorpresa (y evitó un choque entre argentinas) en la jornada de apertura al vencer por 6/2 y 6/4 a Paula Ormaechea, quien arribó al torneo tras consagrarse campeona en Padova, primer titulo después de algo más de dos años para la sunchalense que fuera 59º del escalafón mundial.
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