El propietario del predio tomado por varias personas en calle Piccirilli al 1100, habló en la 89.1 Radio de la Sierra, remarcó que en estos días recibieron amenazas de parte de los ocupas y desmintió que el lugar no estuviera cercado, como surgió desde quienes realizan la toma.
Moauro es el propietario del Vivero Sierraflor, incluido en un predio de 6 hectáreas, de las cuales 2, fueron usurpadas en los últimos días, por parte de varias familias.
“El miércoles detectamos la intromisión de personas, aunque el día anterior empezaron a ocupar. Primero tomaron una manzana, y al día siguiente, la otra. A nosotros nos avisó un vecino y enseguida llamé al 101. Eran dos o tres carpas, y algunas mujeres”, relató.
En relación a la titularidad del predio, el dueño del lugar dijo que ya remitió la documentación pertinente a las autoridades, pero, aunque los ocupas aseguraron que “si aparece el propietario, nos vamos tranquilamente”, la toma continúa.
Asimismo, Moauro aseguró que “no es cierto”, que el ingreso se dio pacíficamente y sin romper nada, como argumentaron quienes tomaron el lugar, “sino que estaba alambrado, pero lo que pasa es que nos cansamos de alambrarlo, porque es la misma gente la que se roba los alambres, y los que tiran la mugre que ahora dicen que hay en el predio”.
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Finalmente, sostuvo que están “esperando respuestas” de la justicia, ante la denuncia que radicaron, y confirmó que la tensión aumentó en las últimas horas y algunos miembros de su familia “recibieron amenazas” de parte de algunos de los usurpadores.
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